Perú y el mundo enfrentan una de las peores crisis de salud pública. Con un sistema de salud descentralizado, el virus COVID-19 pone en conflicto la gestión gubernamental de distintos países.

Wuhan es la ciudad china donde se dió el brote de este temido virus, iniciando así su confinamiento a mediados de enero. Posteriormente, se unieron los países conformados por la Unión Europea a esta drástica medida. Perú, uno de los primeros países latinoamericanos en presentar casos de esta reciente enfermedad, decidió el pasado 15 de marzo decretar a la nación en estado de emergencia poniendo en aislamiento social todo el territorio peruano.
Rapidez frente a la crisis
Cualquier evento o situación que afecte negativamente la imagen o a los públicos de una institución, empresa u organización es una crisis. Los primeros momentos son claves ya que definen si podemos tomar el control de la situación. Tras la dispersión del COVID-19, la toma de decisiones fue distinta en cada país. Italia, con una tardía respuesta ante la dificultad es uno de los países líderes por muertes a causa de esta enfermedad. Asimismo, Estados Unidos decidió no suspender sus actividades. Por esta razón, acompaña a Italia en esta preocupante lista.
Por otro lado, esta pandemia mejoró la valoración del actual mandatario. Martín Vizcarra, presidente de la República del Perú, es tomado como ejemplo por su correcta gestión según la última encuesta de Ipsos: “En el segundo lugar de aprobación presidencial, se encuentra Martín Vizcarra, presidente de Perú (56%); el manejo de la crisis por su Gobierno cuenta con 59% de aprobación y se ubica en el tercer lugar.”
Fortalecimiento de un lazo perdido
La comunicación gubernamental ayuda a explicar, mostrar y justificar las acciones que toma un gobierno. Los antecedentes por corrupción han generado inestabilidad política e institucional. Esto fortaleció la desconfianza de la población hacia sus mandatarios. Desde que empezó el aislamiento social, el presidente llevó a cabo una comunicación permanente con respecto a la gestión pública que se viene realizando en estos momentos críticos.
Asimismo, el Magíster en Organización y Dirección de Personas, Julio Arce Arias, manifiesta que “En una crisis, es muy importante considerar el manejo emocional de los públicos y, en ese sentido, la constante información del propio presidente (en donde también pesó su estilo calmado, sus mensajes claros y transmitir preocupación por las personas) fue un factor que favoreció la aceptación de las medidas tomadas y el respaldo popular e institucional que viene teniendo.”
La toma de decisiones, integridad y transparencia son palabras claves que definen el manejo de la actual gestión puesto que hay una comunicación constante y más humana con la población. Cabe resaltar la importancia de saber elegir a quienes nos van a representar, porque siempre se presentarán situaciones difíciles que se deberán afrontar.
Por: Sofia Alania